Las acciones se pueden clasificar de acuerdo a diversos criterios, como los derechos que otorgan a sus tenedores, el sector económico de la empresa emisora o la forma en que se negocian en el mercado. A continuación, te presento algunos de los tipos de acciones más comunes:

1. Según los derechos que otorgan:

Acciones ordinarias:Otorgan a sus tenedores todos los derechos básicos de un accionista, como derecho a voto, derecho a recibir dividendos y derecho a la plusvalía. Son el tipo de acción más común.

Acciones preferentes:Otorgan a sus tenedores algunos derechos especiales, como prioridad en el cobro de dividendos o derecho a voto en determinadas decisiones. Sin embargo, generalmente no tienen derecho a voto en las decisiones ordinarias de la empresa.

Acciones sin voto:No otorgan derecho a voto a sus tenedores, pero sí les dan derecho a recibir dividendos y a la plusvalía. Suelen ser más baratas que las acciones ordinarias.

2. Según el sector económico de la empresa emisora:

Acciones de empresas cíclicas:Su valor está asociado al ciclo económico. Suelen tener un buen desempeño en períodos de crecimiento económico y un mal desempeño en períodos de recesión.

Acciones de empresas defensivas:Su valor no se ve tan afectado por el ciclo económico. Suelen ser empresas que ofrecen productos o servicios básicos de primera necesidad, como alimentos, medicamentos o servicios públicos.

Acciones de empresas de crecimiento:Su valor está asociado al potencial de crecimiento futuro de la empresa. Suelen ser empresas jóvenes e innovadoras que operan en sectores con alto potencial de crecimiento.

3. Según la forma en que se negocian en el mercado:

Acciones cotizadas: Se negocian en una bolsa de valores.

Acciones no cotizadas: No se negocian en una bolsa de valores. Se pueden comprar y vender directamente a la empresa o a través de un mercado privado.

Recuerda:

Invertir en acciones implica riesgos. El valor de las acciones puede fluctuar y generar pérdidas.

Investiga cuidadosamente antes de invertir en cualquier tipo de acción.

Comprende los riesgos asociados a la inversión.

Diversifica tu cartera de inversiones.

Consulta con un asesor financiero si necesitas ayuda o asesoramiento personalizado.